PIB y presupuesto 2025: ¿Fin de la desaceleración económica para Colombia?
Ejecutivos, inversionistas y autoridades públicas evalúan el impacto del panorama económico para la infraestructura de la región
29 de noviembre de 2024Infraestructura
Por Belén Palkovsky
Colombia atraviesa un momento decisivo para el desarrollo de su infraestructura. A pesar de enfrentar un entorno económico desafiante, caracterizado por una inflación del 13% y tasas de interés elevadas, el país continúa captando el interés de inversionistas internacionales, gracias a su ubicación estratégica, recursos naturales abundantes y un marco regulatorio cada vez más sólido. El déficit presupuestario, que se sitúa entre 12 y 24 billones de pesos, genera una necesidad urgente de explorar nuevas fuentes de financiamiento para proyectos de infraestructura y energía, lo que impulsa al gobierno a considerar reformas fiscales.
En el ámbito energético, Colombia muestra avances significativos hacia la sostenibilidad. Actualmente, la capacidad instalada de energías renovables no convencionales (ERNC) alcanza los 1.8 gigavatios, y hay 80 proyectos adicionales en ejecución que añadirán 3.330 megavatios a la matriz energética, en línea con el objetivo de alcanzar un 25% de participación de ERNC para 2050. Estos progresos han sido posibles gracias a incentivos fiscales y a un marco regulatorio que facilita la entrada de nuevos actores al mercado. No obstante, persisten desafíos importantes, especialmente en la modernización de los sistemas de almacenamiento y transmisión, lo que coloca al país en un escenario de vulnerabilidad energética.
A pesar de estos avances, el marco regulatorio, por veces desconectado de las realidades del mercado, la falta de coordinación entre entidades públicas y el diálogo insuficiente con las comunidades locales en torno a proyectos emblemáticos siguen siendo factores limitantes. Estos obstáculos prolongan los plazos de ejecución y aumentan los costos, afectando a todos los sectores de la infraestructura.
En este contexto, miembros e invitados del GRI Club Infra se reunieron en la conferencia anual realizada en Lima, Colombia, donde se congregaron actores clave del sector público y privado para discutir estas problemáticas. Con la participación de autoridades nacionales, representantes regionales e inversionistas, se debatieron estrategias para acelerar la transición energética, fortalecer la institucionalidad y dinamizar la colaboración, sentando así las bases técnicas y financieras para una nueva etapa de crecimiento y sostenibilidad en Colombia.
El siguiente informe detalla los debates del encuentro y sus conclusiones.
Colombia atraviesa un momento decisivo para el desarrollo de su infraestructura. A pesar de enfrentar un entorno económico desafiante, caracterizado por una inflación del 13% y tasas de interés elevadas, el país continúa captando el interés de inversionistas internacionales, gracias a su ubicación estratégica, recursos naturales abundantes y un marco regulatorio cada vez más sólido. El déficit presupuestario, que se sitúa entre 12 y 24 billones de pesos, genera una necesidad urgente de explorar nuevas fuentes de financiamiento para proyectos de infraestructura y energía, lo que impulsa al gobierno a considerar reformas fiscales.
En el ámbito energético, Colombia muestra avances significativos hacia la sostenibilidad. Actualmente, la capacidad instalada de energías renovables no convencionales (ERNC) alcanza los 1.8 gigavatios, y hay 80 proyectos adicionales en ejecución que añadirán 3.330 megavatios a la matriz energética, en línea con el objetivo de alcanzar un 25% de participación de ERNC para 2050. Estos progresos han sido posibles gracias a incentivos fiscales y a un marco regulatorio que facilita la entrada de nuevos actores al mercado. No obstante, persisten desafíos importantes, especialmente en la modernización de los sistemas de almacenamiento y transmisión, lo que coloca al país en un escenario de vulnerabilidad energética.
A pesar de estos avances, el marco regulatorio, por veces desconectado de las realidades del mercado, la falta de coordinación entre entidades públicas y el diálogo insuficiente con las comunidades locales en torno a proyectos emblemáticos siguen siendo factores limitantes. Estos obstáculos prolongan los plazos de ejecución y aumentan los costos, afectando a todos los sectores de la infraestructura.
En este contexto, miembros e invitados del GRI Club Infra se reunieron en la conferencia anual realizada en Lima, Colombia, donde se congregaron actores clave del sector público y privado para discutir estas problemáticas. Con la participación de autoridades nacionales, representantes regionales e inversionistas, se debatieron estrategias para acelerar la transición energética, fortalecer la institucionalidad y dinamizar la colaboración, sentando así las bases técnicas y financieras para una nueva etapa de crecimiento y sostenibilidad en Colombia.
El siguiente informe detalla los debates del encuentro y sus conclusiones.