¿Nuevos rumbos para el mercado inmobiliario mexicano?
Players evalúan la oferta de vivienda popular, la resiliencia del sector hotelero y las innovaciones en transporte
5 de noviembre de 2024Mercado Inmobiliario
Por Paulo Alfaro
México se ha consolidado como uno de los destinos preferidos para inversiones inmobiliarias, especialmente por su ubicación estratégica. El país comparte una frontera de 3,000 kilómetros con Estados Unidos, el mayor mercado consumidor del mundo. Esta cercanía convierte a México en una alternativa atractiva para empresas que buscan diversificar sus operaciones, especialmente en un contexto de tensiones comerciales entre Estados Unidos y China.
Muchas empresas están recurriendo al territorio mexicano en busca de ventajas competitivas, como menores costos de producción, una mano de obra abundante y calificada, además de incentivos fiscales.
Un ejemplo del creciente interés de los inversionistas en el país es el caso de Terrafina, un fondo inmobiliario mexicano que estaba en venta y atrajo hasta seis compradores. Este interés se debe a la ubicación de sus propiedades en el norte, Bajío y centro del país, zonas donde el fenómeno del nearshoring ha impulsado una demanda sin precedentes de espacios industriales. Cabe recordar que Fibra Prologis adquirió Terrafina, consolidándose como el principal propietario de inmuebles industriales en el país.
Frente a este panorama, se llevó a cabo Mexico GRI Real Estate 2024, donde más de 200 tomadores de decisión se reunieron en Ciudad de México para debatir un panorama inmobiliario histórico en el país. El encuentro destacó la resiliencia del sector hotelero, el crecimiento de la demanda en el sector residencial y el récord en la demanda de espacios industriales.
En el tercer trimestre de 2024, México alcanzó 5.9 millones de m² en construcción industrial, con Monterrey y Ciudad de México concentrando el 33% y el 19% de las nuevas edificaciones, respectivamente. En términos de demanda, se ocuparon 1.9 millones de m², un aumento del 73% en comparación con el mismo período de 2023.
A pesar de este ‘boom’, los participantes señalan algunos desafíos. En primer lugar, compararon la situación del mercado inmobiliario mexicano con la de Estados Unidos, donde los inversionistas encuentran industrias más seguras, con menor riesgo soberano y mayor previsibilidad: “En México estamos en un período de transición”, comenta uno de ellos.
El financiamiento es un tema de preocupación. Los mexicanos enfrentan obstáculos debido a las elevadas tasas de interés de los últimos años, que han hecho inviables muchas operaciones en el sector, especialmente aquellas que dependen de crédito accesible para grandes proyectos.
Sin embargo, se espera una reducción en las tasas: “Estamos empezando a ver una luz al final del túnel”, dice un participante. Hasta la elaboración de este report, el Banco de México (Banxico) había reducido la tasa de interés en 25 puntos base, de 10.75% a 10.5% anual.
Otro punto crítico es la competencia internacional por capital. Con la globalización de las inversiones, los fondos de pensión mexicanos (las "afores") pueden invertir sus recursos en mercados internacionales, lo que disminuye la disponibilidad de capital para proyectos locales.
A pesar de estas dificultades, se destaca el apoyo de los bancos comerciales y de desarrollo para financiar el sector inmobiliario, especialmente el hotelero. No obstante, una crítica común es que los plazos de financiamiento no son lo suficientemente largos para permitir la completa maduración de los proyectos, en particular en el sector turístico, donde el retorno de la inversión puede demorar más en concretarse.
Existen dificultades en atraer grandes fondos de capital privado, que en años anteriores ingresaron al mercado con grandes expectativas, pero muchas veces no lograron el éxito esperado. Los participantes comentan que esto se debe a la falta de escala en muchos proyectos y a la dificultad para reunir portafolios diversificados. “Muchos fondos llegaron a México con la intención de montar carteras de inversión de 10, 12, 15 mil millones de pesos, pero no lograron éxito”, cuenta uno de ellos.
El riesgo cambiario es uno de los principales obstáculos para los inversionistas extranjeros que desean poner sus recursos en el país. Un experimentado player observa que, a pesar de las fluctuaciones, los contratos en pesos pueden ser más ventajosos a largo plazo: “Si analizas desde 1970 hasta hoy, simulando contratos a diez años en pesos y dólares, verás una inversión más certera en pesos”.
Los ejecutivos también destacan la incertidumbre política y la falta de claridad sobre el futuro de las reformas estructurales, como la reforma judicial, que propone la elección por voto popular de magistrados y jueces de la Suprema Corte. La inestabilidad en las instituciones y los posibles cambios regulatorios generan un ambiente de preocupación entre los inversionistas y sus inversiones a largo plazo.
Un player comenta que busca una tasa de retorno de alrededor del 25% en la inversión en resorts, pero algunos desafíos deben resolverse para lograr márgenes de ganancia significativos: “En los últimos dos o tres años, el tema laboral se ha vuelto más complicado”, agrega.
México se ha consolidado como uno de los destinos preferidos para inversiones inmobiliarias, especialmente por su ubicación estratégica. El país comparte una frontera de 3,000 kilómetros con Estados Unidos, el mayor mercado consumidor del mundo. Esta cercanía convierte a México en una alternativa atractiva para empresas que buscan diversificar sus operaciones, especialmente en un contexto de tensiones comerciales entre Estados Unidos y China.
Muchas empresas están recurriendo al territorio mexicano en busca de ventajas competitivas, como menores costos de producción, una mano de obra abundante y calificada, además de incentivos fiscales.
Un ejemplo del creciente interés de los inversionistas en el país es el caso de Terrafina, un fondo inmobiliario mexicano que estaba en venta y atrajo hasta seis compradores. Este interés se debe a la ubicación de sus propiedades en el norte, Bajío y centro del país, zonas donde el fenómeno del nearshoring ha impulsado una demanda sin precedentes de espacios industriales. Cabe recordar que Fibra Prologis adquirió Terrafina, consolidándose como el principal propietario de inmuebles industriales en el país.
Frente a este panorama, se llevó a cabo Mexico GRI Real Estate 2024, donde más de 200 tomadores de decisión se reunieron en Ciudad de México para debatir un panorama inmobiliario histórico en el país. El encuentro destacó la resiliencia del sector hotelero, el crecimiento de la demanda en el sector residencial y el récord en la demanda de espacios industriales.
En el tercer trimestre de 2024, México alcanzó 5.9 millones de m² en construcción industrial, con Monterrey y Ciudad de México concentrando el 33% y el 19% de las nuevas edificaciones, respectivamente. En términos de demanda, se ocuparon 1.9 millones de m², un aumento del 73% en comparación con el mismo período de 2023.
A pesar de este ‘boom’, los participantes señalan algunos desafíos. En primer lugar, compararon la situación del mercado inmobiliario mexicano con la de Estados Unidos, donde los inversionistas encuentran industrias más seguras, con menor riesgo soberano y mayor previsibilidad: “En México estamos en un período de transición”, comenta uno de ellos.
El financiamiento es un tema de preocupación. Los mexicanos enfrentan obstáculos debido a las elevadas tasas de interés de los últimos años, que han hecho inviables muchas operaciones en el sector, especialmente aquellas que dependen de crédito accesible para grandes proyectos.
Sin embargo, se espera una reducción en las tasas: “Estamos empezando a ver una luz al final del túnel”, dice un participante. Hasta la elaboración de este report, el Banco de México (Banxico) había reducido la tasa de interés en 25 puntos base, de 10.75% a 10.5% anual.
Otro punto crítico es la competencia internacional por capital. Con la globalización de las inversiones, los fondos de pensión mexicanos (las "afores") pueden invertir sus recursos en mercados internacionales, lo que disminuye la disponibilidad de capital para proyectos locales.
A pesar de estas dificultades, se destaca el apoyo de los bancos comerciales y de desarrollo para financiar el sector inmobiliario, especialmente el hotelero. No obstante, una crítica común es que los plazos de financiamiento no son lo suficientemente largos para permitir la completa maduración de los proyectos, en particular en el sector turístico, donde el retorno de la inversión puede demorar más en concretarse.
Existen dificultades en atraer grandes fondos de capital privado, que en años anteriores ingresaron al mercado con grandes expectativas, pero muchas veces no lograron el éxito esperado. Los participantes comentan que esto se debe a la falta de escala en muchos proyectos y a la dificultad para reunir portafolios diversificados. “Muchos fondos llegaron a México con la intención de montar carteras de inversión de 10, 12, 15 mil millones de pesos, pero no lograron éxito”, cuenta uno de ellos.
El riesgo cambiario es uno de los principales obstáculos para los inversionistas extranjeros que desean poner sus recursos en el país. Un experimentado player observa que, a pesar de las fluctuaciones, los contratos en pesos pueden ser más ventajosos a largo plazo: “Si analizas desde 1970 hasta hoy, simulando contratos a diez años en pesos y dólares, verás una inversión más certera en pesos”.
Los ejecutivos también destacan la incertidumbre política y la falta de claridad sobre el futuro de las reformas estructurales, como la reforma judicial, que propone la elección por voto popular de magistrados y jueces de la Suprema Corte. La inestabilidad en las instituciones y los posibles cambios regulatorios generan un ambiente de preocupación entre los inversionistas y sus inversiones a largo plazo.
Un player comenta que busca una tasa de retorno de alrededor del 25% en la inversión en resorts, pero algunos desafíos deben resolverse para lograr márgenes de ganancia significativos: “En los últimos dos o tres años, el tema laboral se ha vuelto más complicado”, agrega.